Solo las personas ‘todoterreno’ estarán de acuerdo con la siguiente afirmación: un estilista tiene la obligación de estar al corriente de todos los ámbitos posibles de la belleza. ¡No lo decimos a la ligera! En Universidad de la Imagen vamos a darte 5 motivos clave por los que, como Peluquero/a profesional y amante de la profesión, deberías acudir a una formación de maquillaje próximamente (y nosotros tenemos una el día 13 de abril en Madrid que te revelaremos a continuación).
Los 5 motivos por los que hacer el curso de maquillaje en Madrid con Universidad de la Imagen
Sí, un curso de maquillaje es una gran prioridad para aquellas personas que tengan como propósito tres objetivos: vender, crecer y crear. ¡Estos son las 5 razones por las que hacer este curso es fundamental!
1. Ventas cruzadas con un curso de maquillaje
La venta cruzada es una técnica muy sabia. Por si no la conoces, consiste en vender productos o servicios adicionales a los que el cliente reclama en inicio. Por ejemplo, en Peluquería, una venta cruzada puede ser un lote de productos, o un servicio de maquillaje, tanto para hacerse como para ofrecer como regalo. Cuando estás peinando a tu clienta, el maquillaje es un gran complemento que hace que el peinado luzca más y la persona se sienta todavía mejor con el resultado final. Las fiestas o eventos de importancia son momentos en los que, por lo general, la mayoría recurre a un peluquero, pero pocas personas contratan a un/a maquillador/a profesional exclusivamente para que saque lo mejor de sus rasgos. Por eso es fundamental aprovechar la venta cruzada y poder ofrecer maquillaje como servicio extra y complementario.
2. Calidad profesional
Como profesional Peluquero/a, es fundamental que ofrezcas al cliente calidad en los servicios. No puedes quedarte en “servicios de andar por casa”. Si deseas aprender y crecer, es importante que a tus clientes puedas ofrecerles servicios adaptados y personalizados a su tipo de evento, lifestyle y situación. Es decir, no es igual maquillar a una invitada que a una novia, pero tampoco se asemeja su rostro con el de cualquier otra persona. El maquillaje tiene la gran capacidad de potenciar los rasgos más atractivos y los puntos fuertes, pero hay que saber adecuarlo a cada circunstancia y conocer el visagismo y facciones de la persona con la que trabajas. ¡Por eso un curso de maquillaje es una opción muy hábil como estrategia profesional!
3. Comodidad y confianza del cliente
Como veíamos hace unas líneas, a una clienta se le puede ofrecer un maquillaje cuando se le está realizando un peinado por dos motivos: su comodidad y su confianza. Comodidad, porque no tiene que hacer otra búsqueda de profesionales para saber quién es la persona que la maquillará. Confianza, porque ya conoce tu forma de trabajar y disfrutará del servicio (además de tu comodidad añadida, como ya conoces su estilo, sabrás ‘en qué terreno’ moverte para hacer un maquillaje personalizado para ella).
4. Tu prestigio profesional
Profesionalmente, es necesario que sigas creciendo para seguir creyendo en ti, avanzando hacia proyectos profesionales y creando e imaginando sin límite. ¡Diferencia entre fama y prestigio y concede lo segundo a tu salón! ¿Cómo? Mediante formaciones diferentes, innovadoras y complementarias a tu formación: explorando nuevos campos para descubrir nuevas fórmulas y horizontes de negocio.
5. El formador: Óscar March
Nuestro formador maquillador en Universidad de la Imagen, Óscar, es un apasionado del maquillaje y la peluquería. Desde el inicio de su carrera profesional, comprendió que se trata de un tándem inseparable para enamorar a la clienta: “crear una fusión ideal entre el maquillaje y el peinado, para adaptarlo a tantos estilos como clientas tengamos”. ¡Y se trata de una habilidad que hay que aprender, entrenar y perfeccionar!
En sus formaciones aprenderás a seleccionar materiales, productos y a cómo adaptar las técnicas necesarias. Óscar cuenta con tanta experiencia como formación, en Londres Madrid y Barcelona. Como gerente de su salón desde hace más de 15 años, es un gramn amante de la educación, siempre con ganas de aprender, enseñar y de compartir.
Su filosofía de trabajo: “lo más guapa posible con lo menos posible, porque, al final, la belleza reside en los pequeños detalles”.
